13 abr 2011

I TRAIL DONOSTIA-HONDARRIBIA







Soy uno de los afortunados que consigue dorsal para Zegama Aizkorri Mendi Maratoia, y con el fin de ir familiarizándome con la corta distancia me apunto a una nueva carrera que se celebra en Donostia,   -¿pero ya hay monte allí?- Pues parece ser que si…

Voy con Bautis, la verdad que nos parecemos bastante, ambos somos muy nerviosos y impulsivos, ¿será la sangre minera?, pero eso también tiene su lado positivo, ya que en esta carrera de nuevo los 500 dorsales se acaban enseguida.

El ordenador que no para de chirriar, lo llevo al “taller”, dentro de una semana estará, -¿una semana?-. -Sí, con derecho a 30 días-, el Teleberri informa tiempo veraniego, me olvido de infojobs  y “subo al pueblo”, mi lugar de retiro.

Aquí todo fluye más despacio, parece que el tiempo no avanza, otra época, otro mundo, pero también te hace reflexionar sobre el nuestro. ¿Dónde está la línea del equilibrio?

Tras dormir sin ambiente electromagnético alrededor y los pájaros como despertador, me encuentro rodeado de una carretilla, un hacha, una moto-sierra, una azada…, y mi Aita como jefe, tenemos que hacer leña, que a la caldera también hay que alimentar, aquí no hay gas natural.

Llevo un tiempo bastante perezoso respecto al entrenamiento, me auto-castigo doblando Mendi Martxa, Altsasu y Ondarroa, más de 100 kms en total, pero hay que continuar y estando ya en Puentedey salgo a entrenar, me siento un poco agarrotado y tras lanzarme a tumba abierta por un sendero de piedras noto una molestia conocida, la maldita cintilla ilibiotibial, -¡no, otra vez no, por favor!-.

Sufro un estado de shock, y al día siguiente tras la tarea matinal, voy a la “capital” en busca de ayuda medicinal:

-Hola, buenas tardes, vengo a darme un masaje.
-¿Tu nombre?
-Iñaki.
 -¿…tienes cita?
-No, pero necesito un masaje.
- Ya, pero…
-¡Que necesito un masaje, por favor!
-Espera.

Mientras estoy en la sala de espera leo en una puerta Consulta Fisioterapeuta, se abre  y sale un paciente con la cara afilada y detrás un fisio, siento que puedo tener suerte, la chica de recepción se dirige hacia él y hablan, lo deja descolocado y no deja de mover la cabeza en señal de no, desaparece, al de un pequeño rato vuelve:

-Pasa chaval.
-Muchísimas gracias.

Es de corpulencia fuerte, para nada deportista, pero eso a mí no me importa, yo lo quiero es que me solucione mi problema, nada más, dice que está jugando al Tetris con mi pierna, le comento que el domingo tengo una carrera por montaña, no lo entiende, uno más, veo las estrellas, bendito dolor. Salgo súper contento, un profesional como la copa de un pino.

Al día siguiente salgo a probar, me caliento y fuerzo la maquina, aguanta, ¡uff, menudo alivio!

Y el domingo viajo junto con Bautis y mi Aita a Donostia, con la intención de correr los 29,5 kms que separan La Bella Easo de Hondarribia.

Aparcamos enfrente del polideportivo donde se cogen los dorsales y cerca del lugar de salida, desayunamos un café y calentamos. Aunque es una carrera por montaña, no es nada técnica, es muy rápida, coincide con otra prueba en Orio, apenas veo conocidos, noto un ambiente un poco light, ¿será el efecto ciudad? Eso sí, muy bien organizada.

Me coloco en la mitad del pelotón y pistoletazo de salida. Primeros kms por asfalto, pero enseguida nos encontramos con una pared de hormigón, me recuerda a Bera, Zegama también es así, y a volar, ¡si, volar! Menudo circuito más disfrutón, vamos en dirección contraria al Camino de Santiago, por el Sendero de la Talaia, el cielo está nublado pero las vistas son espectaculares, y aunque tengo la incertidumbre de la rodilla voy disfrutando una barbaridad trazando curvas, no estoy acostumbrado a tal velocidad.

En menos de 50 minutos llego a San Pedro, puesto 228 de 450, donde dos txalupas nos cruzan la ría, un aliciente más de la prueba, mucho ambiente, zona bonita, lugar histórico de pesca, con su típica arquitectura y la Libia bogando en la mar, en San Juan aprieto un poco más, me encuentro bien, me siento feliz, llevo mucho tiempo, 10 meses, sin participar en una carrera corta, desde Galdames, donde me rompí, tras hacer la zona montañera del recorrido, Jaizkibel, y algún tobogán más, un pasillo de gente muy animado nos sube a Guadalupe, se me ponen los pelos de punta, ni me imagino cómo será Zegama, no paro de adelantar corredores, ultima bajada a fuego, entro en Hondarribia, esto está hecho, pequeña cuesta por el casco antiguo, pienso que la meta está arriba y lo doy todo, ¿el arco de meta? 500 metros, me faltan 500 metros, son hacia abajo, un conocido me dice que tengo que entrenar más,(sin comentarios), ahora sí, veo un enorme pasillo que no para de animar. Helmuga!!!

El crono lo he parado en 3:06, 137 en la general y la rodilla ni mu.

Mientras me están quitando el chip de la zapatilla veo a Bautis, que me pregunta cuando he llegado, ¿cuándo voy a llegar?, ¡pues ahora mismo!, me ha sacado 30 minutos, 22 en la general,  Zorionak!!!!

Recojo la bolsa del corredor;  camiseta wapa y una bolsa para el Camel, saludo a mi Aita y a ducharnos al poli.  Es pronto, -¿qué hacemos?-, -¿comemos y vamos al nuevo frontón de Bilbao?-  Menú, sin más, suena el móvil,  me proponen llevar el testigo de la Korrika, ya tengo un entreno programado, veo una heladería, me recuerda a Chamonix, cae uno. El pueblo es precioso, pero Bilbo nos espera.

La lucha continua !!!

meatzari

* NOTA: Aqui os colgamos un video muy majo que ha realizado un corredor frances.
Podeis visitar tambien su blog


video realizado por nikoverdosedetrail