29 may 2011

ZEGAMA AIZKORRI MENDI MARATOIA



Mientras estoy poteando por el pueblo un típico viernes de invierno por la tarde me suena el móvil, es Bautis.

- Iñaki, ¡que te ha tocado!
- ¿Seguro?
- Creo que sí.

Es el día que se realiza el sorteo para poder participar en Zegama Aizkorri Mendi Maratoia, probablemente el mejor maratón alpino del mundo, es dificilísimo que toque, creo que hay unos 200 dorsales para 2.000 personas apuntadas, vamos, una probabilidad del 10%.

Inmediatamente llamo a Jose para que me lo confirme.

-  ¡Felicidades, Zegamero!

Je,je, ¡menuda alegría! A Bautis también le ha tocado, igual que ha Edu, otro gran amigo del pueblo.

Mi modalidad es el UltraTrail, pero correr Zegama es el sueño de todo corredor, hasta hace poco ni me planteaba correrla, me acuerdo cuando iba a verla como público, flipaba literalmente con esa gente.

Tras venir de las Islas Canarias de participar en la TransGranCanaria el planning lo he enfocado a preparar Zegama, sin realizar un entrenamiento especifico pero si participando en Carreras por Montaña relativamente cortas con el fin de coger chispa.

Se acerca el día D, el viernes por la tarde recibo una llamada del responsable de la Peninsula Iberica de una marca de nutrición deportiva, al cual le conocí en julio del año pasado, en la Galarleiz. Ese día debería de estar en Beasain, participando en la EhunMilak, pero una lesión y una juerga hizo que le pidiera un trago a este señor, que montó un puesto de avituallamiento para conocer el mundo del Trail. Durante este tiempo hemos estado puliendo el proyecto, y se ha animado a ofrecerme algo.

Son las fiestas de un barrio de mi pueblo, salgo con los amigos, todos tomando zuritos y yo ha botellines de agua; totalmente surrealista.

Ya estamos a sábado,  ¡menudos nervios! Viajo con Bautis después de comer, Edu pasa el día con la chavala viendo el Triathlon de Bilbao, llegara a la cena. Paramos en el precioso pueblo de Segura, donde tenemos el Albergue, a primera hora de la tarde por fin aterrizamos en Zegama.

Unos piques al futbolín, ¡como niños!, etapa del Giro y a la charla técnica donde recogemos el dorsal. ¡Menudo ambiente!, mucho corredor conocido de todo el mundo, alguno de verlo en Internet, aprovecho para tantear mi nueva profesión, la verdad que me siento muy a gusto, salgo con una sensación muy positiva, creo que valgo para ello. Este es mi mundo.

A las 20:00 nos juntamos en el Albergue con Edu, cenamos con un grupo de catalanes, del Vall de Aran, muy majos, sobre todo una chica, la única del grupo que tiene dorsal.

Final de la Champions, tertulia y a descansar. Hasta las 4:00 consigo dormir relativamente bien, pero hasta las 6:00, hora de levantarse, vuelta y vuelta con unos nervios enormes.

Desayunamos y nos dirigimos a Zegama, hoy están todos y todas, la creme de la creme a nivel internacional, y yo entre ellos.

Me tomo un té, voy al baño, donde hablo con Aitor Osa, muy majo, y a calentar. El pueblo se empieza a llenar, parece Chamonix en la salida del UTMB, el sol hace acto de presencia, 15 minutos antes de la salida me tomo un gel de cafeína, también bebo muchísima agua, y totalmente enchufado para la salida. Homenajes, bertsos, música que te pone los pelos como escarpias, más aun,  abrazo con Edu y pistoletazo de salida.

Vuelta al pueblo a ritmo alto y pared de hormigón, piano-piano pero dándole, primeros kms  a caco,  caminar-correr, se me bloquean las piernas pero en la primera bajada consigo recuperar buenas sensaciones, situación que me anima. Vuelve la última rutina, el grupeto con el que voy en las subidas se me va y en las bajadas le dejo, justo lo contrario que me sucedía antes. Al fondo veo a Uxune, una buena liebre, la alcanzo y la dejo atrás, pasado el km 10 en las bajadas noto una especie de calambre en el abductor de mi pierna derecha, nunca me había pasado nada igual, tampoco le doy demasiada importancia. Hoy he salido con mis últimas zapas, las Mizuno Cabrakan, una autentica maravilla, me encantan; el pie va seguro, mucha amortiguación, buen agarre, cómodas y rápidas.

El sol aprieta por lo que me hidrato bien, mezclando agua con isotónico, también meto algo solido al depósito, creo que estoy haciendo una carrera muy inteligente, burua hotz eta bihotza bero, la cabeza fría y el corazón caliente,  aunque no resulta fácil gestionar los acontecimientos de la carrera, ya que vas totalmente revolucionado, encima el gran público existente no ayuda en tranquilizarte.

Este tramo lo comparto con un equipo francés, uno de ellos, el dorsal 93, en medio de un sendero tira un envoltorio de gel al suelo de forma descarada, totalmente voluntaria, le llamo la atención, se para y lo recoge, le recuerdo que eso es motivo de descalificación, me pide disculpas para que no diga nada, me acabo de sacar el titulo de Arbitro de Carreras por Montaña, por lo que se me generan dudas de cual debe de ser mi actitud, decido pasar del tema, espero que esto no lo lea mi jefe y me tire de las orejas…

Calor, muchísimo calor, cae el primer gel de cafeína, y los dolores musculares que van a más, en los momentos profundos pienso en mis cosas, hoy también viene mi Aita a verme, siendo él una de las causas de mi motivación.

El recorrido es muy machacón, muy rompe-piernas, los 15 primeros kms tampoco me parecen nada del otro mundo, bastante pistero, pero en la subida al monte Aratz cambia la cosa, llega la montaña y la dureza. Aquí comienza la carrera, y aunque voy con buenas sensaciones físicas soy consciente que si quiero participar en este tipo de pruebas tengo que dar una vuelta tuerca más a mi entrenamiento.

Hasta Sancti Spiritu me lanzo como una loca, escucho los gritos del público desde lejos, señal de que el avituallamiento esta cerca, donde me tomo otro gel con mucha agua, tengo muchísimo calor, por lo que decido tirarme un litro de agua por la cabeza.

Empiezo a darle a la subida del Aizkorri, un km vertical que desconozco, ¡pero qué pasa aquí! Muchísima gente animando, rompiéndose la garganta y las muñecas, y yo totalmente conectado, salgo a fuego, al de 10 metros me bloqueo, ¿pero Iñaki, a donde vas? ¡Calamidad! Lasai, motel, lasai!

Nunca había subido un desnivel de esta magnitud en una carrera, durísimo, la media maratón la paso justo en 3:00 horas, me alcanza Uxune y se me va, ¡uff, mala señal! Veo a Txomin, compañero G*T, me anima un monton, Eskerrik asko, lagun! Me deja justo en la última pala del Aizkorri, ¡Indescriptible! Aunque te lo cuentan mil veces y te puedes hacer una idea, la realidad supera la imaginación.

En el avituallamiento  de la cima esta Atharratze, otro compañero G*T, que viene de hacer un tiempazo en el Soplao, Zorionak! Más agua, tanto por dentro como por fuera, y ha darle al tramo técnico del cresterio, el cual me acaba de romper. Durante el trayecto me anima Albertxo, Eskerrik asko!, al final del mismo Antxon Burcio, técnico de la Federación Vasca de Montaña, y los colegas montañeros del pueblo, que me dicen que Bautis va jodido. Me ofrecen agua, hasta ahora la he rechazado en los lugares fuera del avituallamiento, porque se considera ayuda externa, tres minutos de penalización el trago, pero ahora la acepto.

Ya voy roto, ¡maldito cresterio! y me esperan 500 metros de bajada amenazante, cada pisada es una tortura, pero consigo llegar al avituallamiento del km 25 donde está la asistencia sanitaria:

-¡Masaje, quiero un masaje!
-Tírate al suelo.
-¿Notas algo?
-Sí, tienes un bulto.
- Pues dale con fuerza, sin miedo, que quiero continuar.
- Milagros no puedo hacer, encima vienes de una bajada malísima.
- ¿Tienes un anti-inflamatorio?
- No podemos suministrar eso, no sabemos lo que habéis tomado.
- ¡Joder, que no voy dopado!
- Lo siento, no puedo hacerlo.

Continuo pero simplemente ando, y gracias, sigue el recorrido machacón, apenas hay tramos en el que puedas ir suelto, me adelantan muchos corredores, entre ellas una modelo rusa de Salomon, perdón, una corredora, y antes de llegar a Urbia veo otro control sanitario, se repite el mismo protocolo; otra vez al suelo y otro masaje.

Avituallamiento, los colegas que han bajado directos de Aitxuri me preguntan extrañados que me ha pasado, más agua, no recuerdo haber bebido tanta agua en una carrera, otro gel, la última bala que me queda. Me alcanza Edu, que me dice de tirar juntos, pero no quiero ser un estorbo para nadie y le digo que se largue, no me hace caso,-¡Que te largues, la hostia!-.

El sol que es puro fuego, y en la subida a Andraitz, la tercera y última muela, vuelven los ánimos del numeroso público, ahora ya sí que no me importa la ayuda externa, si por cada trago de agua me habrían penalizado con tres minutos todavía continuaría en carrera.

Arrastrándome pero consigo coronar, tengo una mínima esperanza de que la pierna me responda bien en la bajada, pero no es así, encima es bastante mala, me adelanta Cañoroto, otro crack, http://www.vayahistoria.com/le conocí en Castellon, en la MiM, uno de los culpables de que me iniciara en este mundo.

Empieza la pista cómoda, disfrutona, me quedan 10 kms pero no tiene ninguna lógica continuar en este estado, simplemente puedo andar, por lo que decido abandonar, al asimilarlo siento que he fracasado, me he planteado bajar de las 6:00 horas y no lo he conseguido, se me escapa alguna lagrima, sobre todo lo siento por mi Aita, que está en meta esperándome.

En el avituallamiento del km 32 entrego el dorsal y el chip, es la primera vez que lo hago, pero también la primera vez que me pongo un reto tan exigente, vivo una sensación agridulce; por un lado mentalmente me vengo abajo, pero por otro me quedo con la experiencia vivida, me siento un privilegiado al haber participado en la mejor Maraton por Montaña del mundo, ESKERRIK ASKO ZEGAMA!!!

No me arrepiento de nada, igual de no haber visitado al fisioterapeuta la última semana, el gran puntista Felix comenta que el éxito de su larga vida deportiva había sido ir al fisio cuando estaba bien, sin esperar a estar mal, y eso se me quedó grabado. Aunque tampoco creo que tenga excusas, me he puesto un reto ambicioso y no lo he conseguido, pero he vivido una experiencia inolvidable, y quiero VIVIR, sí, con mayúsculas, me quedo con eso. Zegama es Zegama, me parece una falta de respeto salir a terminar, hay que correrla.

Los teléfonos de la Cruz Roja no dejan de sonar, muchos retirados y algún accidente, y por fin llega el Land Rover que nos baja a 4 corredores a meta, parecemos mutilados de guerra. Justo veo entrar a Edu, nos saludamos, me alegro un montón por él,  Zorionak!!!

Veo a mi Aita, el pobre esta aburrido de esperarme, me siento mal, por lo que le pido perdón, encima está un poco pachucho, le prometo que voy a hacer todo lo posible por terminar EhunMilak y dedicárselo. Y si el nuevo trabajo me va bien algo más.


La lucha continua !!!

meatzari